Desde mi trinchera liberal: El Club Bilderberg I.

Atribuyen a Mayer Amschel Rothschild la siguiente frase: "Permitidme fabricar y controlar el dinero de una nación y ya no me importará quién la gobierne.". Los Rothschild, junto con los Rockefeller, pertenencen a la masonería, formaron parte de la sociedad secreta de los illuminati y conforman el núcleo duro del Club Bilderberg.

Es necesario advertir en toda su profundidad el calado de la frase de Rothschild para ver la verdadera dimensión del Club Bilderberg, una organización atufando a masonería y que pretende crear mecanismos de poder supranacionales, la consolidación de un Nuevo Orden Mundial. El primer e ineludible paso es controlar las finanzas. El resto, por añadididura. Esto no es entretenimiento conspiranoico de una mañana aburrida de diciembre sino la entretela pura y dura de la masonería.

Entre los objetivos declarados de los Illuminatis, sociedad secreta fundada por Weishaupt en 1776, destacan:

Abolición de la monarquía y de todo gobierno organizado según el Antiguo Régimen.

Destrucción del concepto de patriotismo y nacionalismo y sustitución por un gobierno mundial y control internacional.

Abolición del concepto de la familia tradicional y clásica.

Prohibición de cualquier tipo de religión, (sobre todo la destrucción de la Iglesia Católica Apostólica y Romana ) estableciendo un ateísmo oficial.

Ahora díganme si no les suena esto demasiado cercano y familiar este guión en la España que nos está tocando sufrir. ¿No ven tras el humo al indio Zapatero? Todo forma parte del programa.

Y hay que reconocer que el programa tiene éxito. Que el Club Bilderberg controla el sistema financiero está corroborado por la presencia asidua del presidente de la Reserva Federal Norteamericana, del Banco Central Europeo y del Fondo Monetario Internacional. De igual modo, representantes de los principales bancos, de las mayores empresas, y de los medios de comunicación más relevantes están presentes en las oscuras reuniones que mantienen los Bilderbergs una vez al año. El meollo del club es financiero, y los políticos son actores secundarios, aunque necesarios en el reparto. Dame el control del dinero y no me importará quien gobierne una nación. Simples títeres en manos de los controladores de la pasta. Se aclara bastante mejor desde esta óptica el plan de rescate bancario internacional. Es parte del juego de los que le dan a la maquinita de hacer dinero, verdaderos causantes de la burbuja con la connivencia de los siempre cortoplacistas políticos de turno. Puro teatro.

Dice Federico Rodriguez de Rivera que es preferible ejercitar el músculo en las cosas buenas y positivas a fijarnos en lo negativo, y tiene razón. Me limito a señalar a quien tenemos enfrente y por dónde se mueven sus poderosos tentáculos. Sólo nos va a salvar ser más fuertes que ellos.